Claves para implementar una estrategia de bienestar corporativo

Ser una empresa saludable está de moda, pero además es rentable. Conscientes de los beneficios que aporta tener empleados sanos y felices a nivel de productividad, de compromiso e incluso de atracción de talento, las compañías españolas están apostando por convertirse en empresas saludables que ponen al empleado en el centro.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) un lugar de trabajo saludable es “aquel en el que trabajadores y directivos colaboran en un proceso de mejora continua para proteger y promover la salud, la seguridad y el bienestar de todos los trabajadores, así como la sostenibilidad del lugar de trabajo”. Por este motivo, más allá del servicio médico o de ofrecer asistencia sanitaria, las empresas están apostando por el diseño de programas integrales que favorezcan la salud y el bienestar de sus profesionales.

Ser una empresa saludable no solo consiste en firmar convenios con gimnasios o realizar talleres de mindfulness, sino que es necesaria la elaboración de un plan que aborde el bienestar del trabajador de forma integral, es decir que se centre en la salud física, nutricional, mental y social. Normalmente el tipo de acciones que la mayoría de empresas ponen en marcha son:

  • Iniciativas para promocionar la alimentación saludable.
  • Campañas de prevención de enfermedades.
  • Programas para el fomento del deporte.
  • Acciones para mejorar el clima laboral y el bienestar en general.
     

Claves para elaborar un programa de bienestar

Según Cerem International Business School, para llevar a cabo una estrategia planificada que promueva los hábitos saludables en la empresa es conveniente seguir una serie de pasos:

  1. Diagnóstico de la situación actual de la empresa. A través de encuestas anónimas se puede recopilar información sobre los hábitos de vida de los empleados y sus preferencias en cuanto a actividades. De este modo, la organización puede conocer cuántos de sus profesionales estarían dispuestos a participar en este tipo de programas.
  2. Diseño del plan. Es fundamental que el plan de bienestar incluya las acciones a realizar, marque los objetivos a alcanzar con las actividades y establezca las oportunas herramientas de seguimiento y valoración. Para lograrlo es recomendable elaborar una agenda que ayude a la ejecución de la estrategia de wellness.
  3. Seguimiento. Es importante establecer un plan de motivación que ayude a los empleados a lograr sus objetivos.
  4. Evaluación. Es necesario conocer el feedback de monitores y empleados que han participado en el programa con el objetivo de solucionar los posibles errores que puedan aflorar y aplicar mejoras a futuro.
  5. Comunicación interna. Para garantizar el éxito del programa es clave dar a conocer a la plantilla el plan de bienestar corporativo. De este modo conocerán las actividades que tienen a su disposición, así como los beneficios que lograrán al llevar un estilo de vida saludable.

Beneficios de ser una empresa saludable

Desarrollar un modelo de empresa saludable supone una estrategia de diferenciación de la compañía que aporta múltiples beneficios entre los cuales Asepeyo destaca los siguientes:

  1. Mejora la salud y la seguridad de los empleados puesto que pone el foco en la prevención de riesgos y fomenta los hábitos de vida saludables.
  2. Mejora la implicación y motivación de los trabajadores al sentirse cuidados y reconocidos por la organización. Ello se traduce en un aumento de la fidelización del talento y del orgullo de pertenencia.
  3. Mejora de la productividad al reducir el absentismo y mejorar el aprovechamiento de los recursos.
  4. Mejora de la imagen de la empresa. La organización se puede convertir en referente de su sector y de la sociedad y ser atractiva para el talento.