¿Cómo impactará la IA en el mercado laboral?
Según un estudio elaborado por el Fondo Monetario Internacional, el impacto de la inteligencia artificial en el mundo laboral afectará a 6 de cada 10 empleos, tanto sustituyendo algunas ocupaciones como complementando otras. A la vez, la implantación de las nuevas tecnologías podría aumentar la desigualdad entre países, ya que los más pobres podrían no beneficiarse de sus ventajas. ¿Cómo transformará el mercado laboral?
La inteligencia artificial (IA) está transformando de manera profunda el entorno laboral, con efectos significativos en todos los sectores. Este cambio tecnológico trae consigo nuevos retos y oportunidades para el sector empresarial, entre los que destacan:
Optimización de procesos
La IA y sus aplicaciones permitirán optimizar los procesos internos que implican una elevada carga de trabajo, mejorar la eficiencia y la precisión en tareas de todos los sectores.
Incremento de la productividad
Automatizar tareas repetitivas liberará tiempo para dedicarse a tareas más estratégicas y creativas. Además de aumentar la productividad, también incrementará la seguridad en los flujos de trabajo.
Mayor personalización y eficiencia
Gracias al análisis de datos que permite la IA, las empresas podrán ofrecer productos y servicios más adaptados a las necesidades individuales a nivel interno (profesionales) y externo (clientes).
Impacto en el empleo
En cuanto al impacto en el mercado laboral, se prevé que las máquinas inteligentes sustituyan más del 10% de los empleos en los próximos años. A la vez, el Foro Económico Mundial también estima que la implantación de la IA permitirá la creación de 58 millones de nuevos empleos. Nuevas profesiones que requerirán a los/as trabajadores/as habilidades digitales, como la programación. En este sentido, algunos perfiles en auge son los analistas de datos, los programadores y los especialistas en IA.
Los sectores más susceptibles a esta transformación, y donde es posible que algunos puestos de trabajo sean sustituidos, serán aquellos en los que predominan las tareas repetitivas y rutinarias, ya que son posiciones más propensas a la automatización. Los expertos hablan de oficios como: obreros, agricultores, analistas financieros o periodistas.
Así pues, la inteligencia artificial está reorganizando el mercado laboral, ofreciendo oportunidades para mejorar la productividad y la eficiencia, pero también planteando desafíos como la adaptación de los trabajadores a nuevos roles y habilidades. Otro reto que supone la IA es la desigualdad entre países: para hacerle frente, será clave el papel de los gobiernos a través de políticas que mitiguen el impacto sobre los países más vulnerables.